Begoña Arana pide reformas urgentes en la Ley Contra la Trata y la Violencia de Género
La directora de Betania expone sus argumentos y reivindica el trabajo de su entidad ante la mesa de trabajo con representación del PP, PSOE, Adelante Andalucía y Vox
Begoña Arana, directora de la ONG Betania, ha intervenido en un grupo de trabajo del Parlamento de Andalucía, con representación de PP, PSOE, Adelante Andalucía y Vox, haciendo un llamado firme y urgente a los representantes de los distintos grupos políticos para reforzar la lucha contra la trata de seres humanos, la violencia de género y las agresiones sexuales en España, con especial énfasis en la situación crítica que vive Andalucía.
Durante su intervención, Arana comenzó presentando la trayectoria de Betania, una organización fundada en 2011 en La Línea de la Concepción, Cádiz, que hoy opera en cinco comunidades autónomas. La entidad, centrada en la atención a personas en situación de exclusión y vulnerabilidad, trabaja con mujeres y niñas víctimas de trata, prostitución, violencia de género y explotación sexual. «Betania nació con la misión de acompañar a las personas más vulnerables, y en especial a las mujeres y niñas que viven bajo estas terribles formas de violencia», afirmó Arana.
España: una alarmante realidad sobre prostitución y trata de personas
Uno de los temas más graves planteados por Arana fue la creciente problemática de la trata de seres humanos en España. Subrayó que, según los datos más recientes, España se ha convertido en el primer país de Europa en demanda de prostitución y el tercero a nivel mundial, solo por detrás de Tailandia y Puerto Rico. «Nos reconocen en el resto de los países como la Tailandia europea», denunció, haciendo hincapié en que esta situación convierte a España en un destino clave para las redes criminales de trata de personas con fines de explotación sexual.
Pese a la gravedad de la situación, España carece de un marco jurídico específico que regule la trata de seres humanos. Arana destacó que, aunque el delito está contemplado en el artículo 177 del Código Penal y se incluye dentro de los tipos de violencia contra mujeres y niñas, se necesita un desarrollo normativo autónomo que permita abordar de manera integral este delito. «No existe un plan integral de lucha contra la trata desde 2018, lo cual refleja una preocupante dejadez institucional en la atención a estas víctimas», advirtió.
Andalucía: cifras alarmantes de violencia de género
Arana destacó que Andalucía, en particular, enfrenta un contexto especialmente crítico en términos de violencia de género y trata de personas. En 2023, la comunidad autónoma registró el mayor número de asesinatos machistas en España, con un total de 16 mujeres asesinadas. A nivel nacional, 58 mujeres fueron asesinadas en 2023 y, en lo que va de 2024, ya se han registrado 34 feminicidios. Además, el número de denuncias por violencia de género en Andalucía alcanzó las 39.990 en 2023, una cifra que refleja la magnitud del problema.
«La falta de prevención efectiva y la ausencia de campañas educativas en las etapas más tempranas de la vida son problemas fundamentales que debemos abordar», subrayó Arana. En su opinión, la prevención es clave para mitigar las conductas violentas antes de que se produzcan, y es una de las principales líneas de acción que Betania está desarrollando en sus campañas de sensibilización.
La necesidad de una respuesta multidisciplinar y centrada en las víctimas
Begoña Arana también destacó la importancia de un enfoque multidisciplinar en la atención a las víctimas de violencia y trata. «En Betania trabajamos con un equipo especializado que aborda cada caso desde una perspectiva individual, proporcionando atención emocional, social, judicial y laboral a las víctimas», explicó. Este enfoque, que combina la intervención psicológica y emocional con la inserción social y laboral, es lo que permite obtener resultados positivos y, sobre todo, éxitos sostenibles en los procesos de recuperación.
Actualmente, Betania gestiona recursos residenciales en cinco comunidades autónomas, donde proporciona atención integral a mujeres víctimas de trata y violencia de género. En Andalucía, la organización cuenta con 82 plazas para mujeres y 21 plazas para sus hijos e hijas, las cuales están completamente ocupadas. En total, Betania ha atendido a 294 mujeres en los últimos años, de las cuales 172 han completado sus procesos con éxito. «El éxito no se mide solo en términos de resultados numéricos, sino en la capacidad de las mujeres para recuperar su autonomía y dignidad», destacó Arana.
Además de la atención directa a las víctimas, Betania también trabaja en campañas de sensibilización y formación dirigidas a profesionales de diversos ámbitos, incluidos los sectores policial, judicial y sanitario. «Es crucial que todos los actores involucrados en estos procesos, desde los fiscales hasta los médicos, comprendan la gravedad de estos delitos y actúen con la sensibilidad necesaria», afirmó Arana, quien señaló que la implicación del ámbito sanitario es particularmente importante en casos de agresión sexual.
La interconexión entre la prostitución y la trata: una preocupación creciente
Uno de los puntos más impactantes de la intervención de Arana fue la relación directa entre la prostitución y la trata de personas. «La prostitución alimenta la trata, y la trata alimenta la prostitución», subrayó, advirtiendo que Andalucía es la comunidad autónoma con mayor presencia de prostitución en España, especialmente en la provincia de Málaga. En este sentido, Arana insistió en la necesidad de abordar la oferta y demanda de prostitución desde una perspectiva abolicionista, algo que, según ella, no se está haciendo actualmente en España.
Arana también expuso la creciente captación de jóvenes españolas por parte de redes criminales de trata, un fenómeno que está afectando especialmente a las universitarias. «Estamos viendo cómo estas redes utilizan técnicas como el ‘loverboy’, aprovechándose de las vulnerabilidades emocionales y económicas de estas jóvenes para captarlas», denunció. Según Arana, este tipo de captación es un reflejo de la sociedad de consumo en la que vivimos, donde los criminales ofrecen bienes materiales a cambio de lealtad, lo que lleva a muchas jóvenes a situaciones de explotación sin ser plenamente conscientes del peligro que enfrentan.
Recomendaciones y propuestas para el cambio
En su intervención, Arana presentó varias propuestas para avanzar en la lucha contra la trata y la violencia de género, incluyendo la necesidad de reactivar un plan integral de lucha contra la trata y de desarrollar un marco normativo específico que aborde este delito de manera autónoma. Asimismo, instó a los poderes públicos a intensificar la prevención en las escuelas, trabajando en la sensibilización desde las primeras etapas educativas para que las nuevas generaciones crezcan con una mayor conciencia sobre la igualdad de género y el respeto a los derechos humanos.
Otra de sus propuestas fue dar más voz a las víctimas en los procesos de toma de decisiones. «Las mujeres que han superado la violencia deben tener un papel activo en la construcción de políticas que realmente aborden sus necesidades», afirmó, abogando por una participación más directa de las víctimas en los espacios de debate y formulación de políticas públicas.
Finalmente, Arana concluyó su intervención reafirmando el compromiso de Betania en la lucha contra la trata y la violencia de género. «Queda mucho por hacer, pero no podemos bajar la guardia. Las mujeres y niñas que sufren estos delitos merecen una respuesta integral y humana, que las proteja no solo en el momento de la agresión, sino también en su camino hacia la recuperación», concluyó.